La Higuera es un árbol
robusto y de tamaño pequeño, cuyo nombre científico es Ficus Carica, que en
latín significa: Ficus, Higuera y Carica, Región de Asia Menor de donde
proviene. Mencionada en el Antiguo Testamento, como uno de los árboles de la abundancia
en la Tierra Prometida: “Legaron
al Valle de Escol y cortaron allí un sarmiento con un racimo de uva, que
transportaron con una pértiga entre dos, y
también granadas e higos”. (Números 13:23)
La
Higuera produce los conocidos higos, además de producir tan exquisitos frutos,
son muchos los beneficios medicinales que ofrecen tanto su fruto como sus hojas,
las cuales tienen propiedades emolientes, refrescantes, rica en vitaminas, minerales
y fibras.
En la Biblia se habla de
“La Higuera estéril y seca”; conocida como la parábola de Jesús y la Higuera. Y
es que Jesús luego de su entrada triunfal a Jerusalén, estuvo que salir a la
ciudad de Betania, en la que pernocto por una noche, a su regreso, al amanecer
del día siguiente, Jesús sintió hambre, pudiendo divisar en el camino una mata
de higuera, acercándose a ella con la esperanza de saciar su hambre, para su
sorpresa solo encontró más que hojas; y es así como le dijo: “¡Que nunca jamás
brote fruto de ti!” y al terminar esas palabras la higuera se secó, ante tal
acontecimiento los discípulos que lo acompañaban, sorprendidos se preguntaban ¿Cómo al momento
quedó seca la higuera? Y Jesús les respondió: “Yo os aseguro; si tenéis fe y no
vaciláis, no sólo haréis lo de la higuera, sino que si aún decís a este monte:
‘Quítate y arrójate al mar’ así se hará”, asegurándoles Jesús a sus discípulos
que todo lo que pidan con fe a través de la oración, les será concedido. (Mateo
21:17-22).
Muchas han sido las
críticas que se le hacen a Jesús por tal acontecimiento, siendo Jesús, un
hombre y un maestro lleno de bondad y misericordia. Tomando en cuenta que para
esa entonces era primavera por lo que era casi imposible que la higuera
estuviera frutos. Sin embargo, y de acuerdo con la Enciclopedia de la Biblia
Estándar Internacional, en el eje de la hoja de la higuera, pueden encontrarse
pequeños higos comestibles, por lo que al aparecer las primeras hojas en
primavera, todas las matas de higuera fértiles debían tener algunos pequeños
higos, de lo contrario serían estéril durante toda la estación.
De acuerdo a todo lo
anterior, puedo deducir, que más allá de Dios querer demostrar su poder y el de
la oración con fe; y que a la vez considerar tal acontecimiento como una
maldición. Pienso, que Jesús lo que hizo fue revocar a la mata de higuera,
simplemente porque no estaba cumpliendo con la función para la cual fue creada:
“Producir frutos” que saciaran al hambriento.
También comparto la
interpretación que hizo de este episodio, el Maestro, filósofo y pedagogo
francés Omraam Mikhaël Aïvanhov, al que leo diariamente; y quien considera que
en este acontecimiento Jesús se dirige a unos hombres cuyo intelecto y corazón
son improductivos. A la vez que compara al árbol de la higuera con el hombre
que debe dar frutos, de lo contrario el Espíritu lo abandona resultando una
maldición para él, por lo que debe trabajar y estar siempre dispuesto a
producir frutos.
Referencias:
Nueva
Biblia de Jerusalén (1999). Descleé de Brouwer: Bilbao, España.
Curiosidadesbiblicas00.blogspot.com/2010/04
Omraam
Mikhaël Aïvanhov (1999). Pensamientos Cotidianos. Editions Prosventa. Francia
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