A
Nazaret, fue enviado por Dios, un ángel llamado Gabriel, en busca de una Virgen
desposada con un hombre llamado José; la Virgen era María, a quien el ángel le
dijo “alégrate, llena de
gracia, el Señor esta contigo” este saludo confunde a
María quien se preguntaba que quería decir el ángel con esas palabras, por lo
que el ángel le aclara sus dudas al decirle “No
temas María, porque has hallado gracia delante de Dios, vas a concebir en el
seno y vas a dar a luz un hijo a quien pondrás por nombre
Jesús”. Pero María en su asombro le pregunta que
como será eso, si ella no ha conocido varón, a lo que le responde Gabriel “El Espíritu Santo vendrá sobre ti y
el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el que ha de nacer será
Santo y se llamará Hijo de Dios”. (Lucas 1: 26-36).
De allí cuando rezamos el Credo, decimos:
“creo en Jesucristo su
único Hijo, nuestro Señor; que fue concebido por obra y gracia del Espíritu
Santo; y nació de María Virgen”.
Y
se esta manera es concebido Jesús, y en cuanto a su nacimiento, sabemos que por
aquellos días César Augusto, ordena el empadronamiento de todo el mundo y es
así como el primero de ellos se realiza siendo Gobernador de Siria Cirino,
todos y cada uno iban a su ciudad a empadronarse. José fue desde Galilea, de la
ciudad de Nazaret a Judea, ciudad de David cuyo nombre es Belén, debido a que
José era de la casa y familia de David. En donde fue empadronado junto a su
esposa María la cual estaba embarazada. Estando allí se le cumplieron los días
del alumbramiento, dando a luz a su hijo primogénito, el cual envolvió en
pañales y lo acostó en un humilde pesebre porque no tenían sitio en el
albergue. (Lucas 2:1-7)
Todos
los 24 de Diciembre, una vez que coloco al Niño Jesús en el pesebre de nuestro
hogar, hago la siguiente oración, y que hoy comparto con ustedes.
Hoy te pedimos que el nacimiento de Tu Hijo en Belén, sea el
despertar a cambios profundos en nuestros corazones; conscientes de Tu Divina
presencia.
Te prometemos en este día,
ser considerados con nosotros mismos, amables y generosos con los demás y
mantener siempre presente tu amor en todos nosotros. Amén.
Feliz Navidad y
Venturoso año 2013