La devoción al Cristo de
Medinaceli, es una devoción popular en Madrid, en todas sus comunidades y
muchas partes de España. Un gran número
de personas durante todo el año visitan la Basílica regida por los Padres Capuchinos,
para contemplar y rezar al Cristo de Medinaceli. El 1° de septiembre de 1973,
el papa Pablo VI elevó a Basílica Menor la iglesia de Nuestro Padre Jesús. La
imagen fue tallada en Sevilla-España a mediados del siglo XVII y tiene una
altura de 1,73 metros y su iconografía se corresponde a la de los Cristos
denominados de la “Sentencia”. La imagen del Cristo de Medinaceli, representa
el momento en que Pilatos se dirige al pueblo judío, diciéndole: “He aquí al
Hombre”. El Cristo de Medinaceli es venerado todos los días viernes,
considerado por la Iglesia como el día de la Pasión y Muerte de Nuestro Señor
Jesucristo. Los viernes Santo a partir de la siete de la tarde se realiza la
gran procesión del Cristo de Medinaceli, recorriendo las principales calles de
Madrid y con gran concurrencia de personas que expresan su devoción,
agradecimiento y sacrificios. La procesión es organizada por la Cofradía
Primaria Nacional de la Real e Ilustre Esclavitud de Nuestro Padre Jesús
Nazareno, la cual fue fundada en 1710, y a la que perteneció una gran parte de
la nobleza española, miembros de la Casa Real y muy especialmente el Duque de
Medinaceli, quien ostentó el título de Hermano Mayor. Hacia el año 1689, se
erigió una capilla, en el convento de los Padres Trinitarios Descalzos, en
donde estaba depositada la imagen del Cristo, la capilla fue una donación del
Duque de Medinaceli.
El 18 de abril de 2014
(viernes Santo), estuve la gran oportunidad de asistir a la majestuosa
procesión del Cristo de Medinaceli, promesa que había hecho en agradecimiento a
favor recibido en la pronta recuperación y éxito de una intervención quirúrgica
en febrero de 2014. Es casi indescriptible la emoción que sentí al contemplar
su imagen y la multitud de personas que lo esperaban a su paso, específicamente
en la calle de Alcalá de Madrid, lugar en donde estaba ubicado en compañía de
Edi, Franklin y Leylanis quien en agosto
de 2014 nos llevó a Franklin y a mí
a conocer al Cristo de Medinaceli
y su Basílica.
Fuente: Fernández
Domingo. Historia del Cristo de
Medinaceli. Editorial Everest, España, 1988
La fe es la expresión mas importante de un cristiano, ella nos ha permitido continuar en este mundo convulsionado y nuestro en el vivimos. Lo evidencia tu fe, Fernando, en la imagen del cristo de Medinaceli. gloria a Dios.
ResponderBorrarVioleta