El domingo 16 de junio de 2019, posterior al domingo
de Pentecostés, la Iglesia Católica, celebrará la fiesta del misterio de la
Santísima Trinidad, un sólo Dios en tres personas Padre, Hijo y Espíritu Santo.
Declarada oficialmente como fiesta de la Iglesia Católica por el Papa Juan XXII
en el año 1334.
Encontramos, en las Sagradas Escrituras que:
“Una vez bautizado Jesús, salió
del agua; y en esto se abrieron los cielos y vio al Espíritu de Dios que bajaba
como una paloma y venía sobre él. Y una voz que salía de los cielos decía:
”. (Mateo 3:16-17)
El pasado 28 de mayo, la Iglesia Católica celebró la
festividad de San Emilio, a quien le tocó vivir el horror del rey arriano
contra los cristianos, debido a su creencia trinitaria y no arriana. Es por
esta razón que Emilio por defender su fe en la Santísima Trinidad sufrió el
martirio.
El rey arriano, tenía la manía de perseguir a las
mujeres de la alta nobleza, a quienes despojaba de sus ropas en plena plazas
públicas, castigándoles lentamente hasta que fallecían sangrando.
Emilio, cuñado de una de esas damas, horrorizado por
tal atrocidad, protestó enérgicamente ante los jueces, catalogándolos como
inhumanos, siendo también condenado a morir por ser cristiano. Siendo
martirizado en Túnez, África, hacia el año 484; una vez que el 25 de febrero,
el rey de los Vándalos (477-484) redactó un decreto mediante el cual había que
matar a todos los cristianos que no se hicieran arrianos.
San Emilio, fue torturado de la manera más
desgarradora, siendo arrastrado por las calles hasta que su piel quedara pegada
al asfalto. Además, de ser lanzado desde lo más alto atado de manos. Quienes lo
torturaron fueron tan despiadados con él, por considerarlo como el más poderoso
de pensamientos en su fe.
Es muy poca la información que se tiene de este gran
mártir quien entregó su vida llena del Espíritu Santo por defender su fe.
En la edad media, las reliquias de San Emilio fueron
llevadas a Nápoles, Italia, procedente de África. Y en el siglo XIV los
farmacéuticos lo eligieron como su excelso patrón. Santo mártir, defensor de su
fe a la Santísima Trinidad.
Suplica a San Emilio
Padre Misericordioso, que esparces los dones de tu
Espíritu a todos los que se acercan a ti con amor sincero. Escucha esta súplica que hacemos al glorioso San Emilio.
San Emilio, enséñanos a apreciar la nobleza de la
Santísima Trinidad. Y llénanos
de tu fe y de tu sentido de justicia, para alzar nuestras voces ante cualquier
acto de maldad y de injusticia. Por
Jesucristo Nuestro Señor. Amén
Hemos sido bautizados, en el nombre de Padre, del Hijo
y el Espíritu Santo, cumpliendo así el mandato del Señor:
“Id, pues, y haced discípulos a
todas las gentes bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu
Santo, y enseñándoles a guardar todo lo que yo os he mandado. Y he aquí que yo
estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo”. (Mateo 28:19-20)
Excelente la historia de San Emilio. Muy triste lo que pasa en la historia por las creencias religiosas y la intolerancia
ResponderBorrarSan Emilio, siempre justo y defensor de su fe, aún sabiendo que sería castigado por defender las injusticias, se mantuvo fiel a sus principios y a sus creencias.
ResponderBorrarSan Emilio te pedimos que nos colmes de tu fe y sentido de justicia, creemos en la Santísima Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo y sabemos que Dios, nuestro Señor estará siempre con nosotros hasta el fin del mundo.
Estas historias siempre nos hacen referencias a la constancia e importancia de la fe, especialmente en momentos tan difíciles, como los que vivimos en la actualidad.
Gracias por darnos siempre estos "pequeños" aportes, querido amigo.
Cariños Fer.
Ede