Se trata de Santa Cristina, conocida también como Cristina de Bolsena, Cristina de Tiro o Cristina la Gran Mártir, es una santa del siglo III venerada por la Iglesia católica, la Iglesia ortodoxa y la Iglesia anglicana. Nació en Toscana, en la margen derecha del lago Bolsena.
Es muy poco lo que se conoce de Santa Cristina, la información que habla de ella, se basa en puras leyendas.
Cuenta su leyenda, que era hija de Urbano, un oficial del palacio cercano al lago de Bolsena en la región Toscana de Italia. Urbano quería obligarla a rendirles sacrificios y cultos a dioses paganos. Es así, como a los 11 años Urbano, decide encerrarla en una torre llena de Dioses paganos y acompañada de doce sirvientes. Pero no se conformó con encerrarla, sino que también la sometió a grandes suplicios con el fin de obligarla a rezarles a tales dioses.
De acuerdo a la leyenda, Cristina durante su encierro recibía la visita de tres ángeles, que le daban fortaleza para seguir resistiendo los martirios a los que era sometida por su despiadado padre. Quien viendo agotado todo su esfuerzo por obligarla a rendir honores a estos dioses paganos, decidió arrojarla al mar con una piedra atada al cuello. La leyenda cuenta que, en esta oportunidad nuevamente los ángeles la salvaron, la piedra sostenida por los ángeles, se convirtió como en un flotador y sacó la niña a la orilla. Y su despiadado padre, fue cruelmente castigado.
Sin embargo, los suplicios de Cristina no terminaron allí. Los jueces siguieron sometiéndola a terribles tormentos, como el de la parrilla ardiente, el del horno encendido, el de la mordedura de serpientes venenosas, el del corte de los senos; pero como nada de esto acababa con su vida y ya no se podían inventar más suplicios, resolvieron cortarle la cabeza y así la mandaron al cielo.
Hacia el año 1880 en Bolsena, unos obreros cuando hacían trabajos de cimientos en una casa, se encontraron con un cementerio cristiano cuya data es del siglo IV. En dicho cementerio apareció una tumba de una Cristina.
Santa Cristina, es la patrona de Bolsena, un pueblito italiano en donde se obró el milagro del famoso corporal que quedó manchado con la sangre de Cristo. Y su festividad se celebra el 24 de julio.